El Parlamento Europeo quiere acentuar el cariz social de la reforma del mercado eléctrico. La Eurocámara está preparando ya sus enmiendas y en su primera propuesta se plantea, entre otras medidas, la prohibición de “las desconexiones eléctricas de los clientes vulnerables y los afectados por la pobreza energética y asegurar que estos hogares reciben el suministro eléctrico para cubrir sus necesidades básicas”, según el texto redactado por el ponente oficial del Parlamento, el español Nicolás González-Casares, y enviado a los demás grupos políticos este fin de semana. Este eurodiputado debe ahora negociar con ellos la forma definitiva de la posición de la Eurocámara.